Vuelta a las canchas para Josh Homme y los suyos luego de de cuatro años. Queens of the Stone Age saca a la luz su séptimo album titulado «Villains» y se va a alejando cada vez más del Stoner de violas saturadas y riffs gordos desérticos Kyuissticos para meterse en Rock puro propiamente dicho. Si bien «…Like Clockwork» fue una ficha afuera de la mesa, entiéndase que me refiero a un discazo sin comparación en su discografía, «Villains» tiene mucho del viejo y querido «Lullabies to Paralyze» que con su sonido más «fácil» de interpretar por así decir, llena mucho las expectativas.
Como punto más destacado, a lo largo de la placa se escuchan muchos sonidos marcianos llenos de máquinas a veces para establecer un clima, otras veces siguiendo un rítmo pero no de una manera abusiva con lo cual arman una armonía agradable, no hay punchi punchi no se asusten.
«Villans» tiene un gran comienzo con mucho ritmo casi bailable con «Feet Don’t Fail Me» y «The Way You Used to Do» y como es usual acá predomina el gancho y te sorprende tarareando el riff mucho tiempo después de haber terminado el disco.
Más adelante, si bien el ánimo de la placa va decayendo «The Evil Has Landed» (primer single del disco) la levanta siendo una canción con muchos estados y cambios de ritmos.
Por el lado del arte de tapa, el encargado fue Boneface, el mismo el cual hizo el anterior trabajo.
Y la producción estuvo a cargo de Mark Ronson, conocido por haber trabajado con Lady Gaga y Bruno Mars entre otros.
Que más se puede decir? La banda se vendió? Ahora lo puede escuchar tu hermanita? No, ni en pedo porque sigue siendo Queens of the Stone Age y vas a ver que con cada escucha le vas a descubrir un detalle nuevo además de que la siguen rompiendo a pesar de que con la placa anterior la vara haya quedado un poquito alta.
Buenas muchachos/as, como andan tanto tiempo? Acá volvemos al rodeo de esto de escribir sobre los discos que tengo en la repisa.
Hoy vamos a ver el primer disco de Queens Of The Stone Age, que justamente es auto titulado de la misma manera. Pero para comprender el entorno y la historia que lo rodea, vamos a ver cómo termina la trama de la gran banda anterior de Josh Homme, Kyuss, que oriundos de Palm Desert fueron los protagonistas de esta historia.
El colo Homme, desde el 87 fue el violero de Kyuss, que con John García, gran cantante, dieron origen al estilo Stoner Rock. Ahora, que carajo es el Stoner Rock? Puede descifrarse como una suerte de Doom Metal, sin tanto olor a Metal, con mezcla de mucho rock psicodélico y fumón, violas plagadas de distorsión con mucho color retro, gran influencia del estilo viene de la mano de Black Sabbath y el rock psicodélico de los 60′ como Cream, por citar a alguno.
Luego de editar «…And The Circus Leaves Town» (1995), Kyuss se disuelve desparramando a sus integrantes en diferentes agrupaciones y/o proyectos, Brant Bjork (Baterista) sería parte de Fu Manchu, Nick Oliveri (Bajista) se iría junto con Homme, John García haría proyectos como Unida y Hermano, y más actualmente en Vista Chino junto con Bjork y Oliveri, últimamente como solitario junto con varios invitados. Y finalmente Josh Homme formaría Queens Of The Stone Age, la banda en cuestión.
El año en que comienza todo esto es 1995, apenas se disuelve Kyuss, Homme se muda a Seattle para tocar con diferentes integrantes de diferentes bandas, ni lento ni perezoso, recluta a Nick Oliveri, Alfredo Hernández (Baterista ex-última etapa de Kyuss), Dave Catching en guitarra, y el mismo Homme en la otra guitarra y encargado de las voces, primero bajo el nombre de Gamma Ray y luego, por el obvio conflicto con la igualdad de la conocida banda Power Metal de Kai Hansen, rebautizada como Queens Of The Stone Age.
Ya en 1997, la banda edita el primer disco que veremos hoy:
Y que hay en QOTSA, de todo lo que nombramos pero veamos un poco en detalle.
Demostraciones de las raíces stoner las hay y en demasía en esta placa, “Regular John” es una de ellas, con gancho puro, machaque del desierto y un estribillo que queda dando vueltas en la retina.
Con “Avon” Homme va enfilando el margen al cual quiere llegar, negando totalmente que el stoner es su sello y poniéndole el apodo de “Robot Rock”, obviamente estaba más que fumado.
“If Only” fue el corte de difusión y encierra más aún el estilo logrado por el colo, las violas se oyen saturadas de fondo, y el estribillo es súper ganchero, si nunca escuchaste a la banda seguro que esta es una de esas que escuchaste por ahí y ahora caes de donde viene.
Kyuss se hace totalmente presente en “Walkin On The Sidewalks” con medios tiempos dumbetas, una suerte de riff inspirado en lo más podrido de Iommi que evoluciona en el estribillo mucho más suelto e inofensivo, pero con un solo colgado como pocos y de fondo saturante fiel al estilo.
Pero si hablamos de colgadura “You Would Know” se lleva el premio de la placa, Josh definitivamente parece cantando en dope, pero he ahí lo atractivo del grupo, esta banda tiene la particularidad de que a la primera no te da, pero inevitablemente vas a escucharla varias veces más sin querer y te engatuza, no te sé decir porque.
En lo personal mi favorita es “The Bronze” con el efecto de la intro, sumado a los solos interminables que tiene más la melodía llevadera con tintes oscuros que tiene, la joya del disco corta pero efectiva.
Otro inevitable espejo de Kyuss es “How To Handle A Rope (A Lesson In The Lariat)” es totalmente imposible no cerrar los ojos e imaginar que John García tranquilamente podría darle la cuota desértica que pide a gritos.
“Mexicola” tiene a un Nick Oliveri tocando su bajo directamente dentro de un pantano del sur, lo podrido que suena en todo el tema es sublime, muy lograda la melodía y para no ser menos y levantar Homme, con su timbre de voz le saca todo lo tenebroso que demuestran los instrumentos.
Vamos a saltearnos varios temas, no hace falta escribir de todo un poco, con “You Can’t Quit Me Baby” es destacable el riff que usa Homme en el estribillo.
Después es destacable “Give The Mule What He Wants” temazo, muy stoner, técnicamente muy destacado al gusto de lo usual en Queens Of The Stone Age, es súper característico, con un estribillo sostenido y un riff podrido.
Y si de melodías colgadas hablamos, “Spiders And Vinegaroons” se lleva el premio, es un monumento al cuelgue armónico con sonidos espaciales de fondo y punteos que dan protagonismo al rumbo que lleva hasta que explota con un ritmo más que under.
El disco finaliza con “I Was A Teenage Hand Model” y demuestra que Queens Of The Stone Age es una banda que aunque Homme diga que es Robot y bla bla bla Rock, tiene terriblemente presente el pasado inmediato. Pasarán los años y cada disco se alejará de lo que fue esto, pero mientras tengas estos discos, vas a escuchar un brazo de Kyuss.
Queens Of The Stone Age, siempre fue muy distinto a Kyuss, eso no se discute. Tampoco se discute que siempre se trata de encontrar algunas migas que se le hayan caído a Josh Homme del viejo Stoner que nos tenía acostumbrados, y dejame decirte algo… acá en “…Like Clockwork” no hay un mísero rastro. Pero no significa que el disco sea malo, al contrario, es una faceta depre del bueno de Homme que interpreta todo con sonidos pseudo-industriales. Un gran mérito que tuvo este sexto LP salido en 2013 de QOTSA que llegó a ser número 1 en el ranking Billboard, que no es poca cosa.
Dotado de varios invitados, de la talla de Nick Oliveri (Ex Kyuss y QOTSA), Jake Shears (Scissor Sisters), Mark Lanegan (Screaming Trees), Alex Turner (Arctic Monkeys), Trent Reznor (NIN), Elton John, Dave Grohl (Nirvana, Foo Fighters, Millones de etcéteras), logra un álbum de canciones llevaderas y pegadizas a la 5ta o 6ta escucha (eso es una opinión personal).
Veamos de qué se trata cada una de las pistas:
Arrancamos con sonidos penumbras y roturas con “Keep Your Eyes Peeled”, con un bajo dándole duro y parejo al óxido, insisto que es una placa para darle VARIAS veces.
“I Sat By The Ocean” alegra un poco el asunto con la melodía de la viola, sigue con distorsiones algo industriales y extrañas pero vuelve a la normalidad cuando cuenta acordes a la par de la vos de Josh, es de lo mejor del disco.
“The Vampyre of Time and Memory” para mi tiene sonidos sacados del Fruity Loops que junto con el medio tiempo de los acordes lamentablemente da sueño.
Por suerte cambia todo cuando empieza a sonar “If I Had a Tail” preparando terreno para los siguientes temas, en este caso sin ser algo rockero rutero de por sí te hace mover los pies, sobre todo con el juego del Hit Hat del final del estribillo, hay sello de Queens acá.
Y si buscábamos sello de calidad acostumbrada “My God is the Sun” es la cereza arriba de la crema, esta sí te levanta, esta es rockera, esta tiene todos los ingredientes para que patees todo a la mierda. Si fuera la mitad del LP como “My God…” sería un tremendo disco.
“Kalopsia” baja los humos, pero de buena manera, es una “balada” muy llevadera con sonidos artificiales, sí, y cuerdas limpias pero va subiendo los ánimos con el estribillo, otra de las joyitas del disco.
Mis perdones a Josh pero no le da con la voz fina con “Fairweather Friends”, menos mal que en el puente se aviva y engrosa, bonita canción.
Con “Smooth Sailing” es una mezcla de algo parecido a Kool And The Gang lleno de medios tiempos sumado a la actitud característica de Homme de cantar como si todo le importara un carajo… pero con onda. Me parece que me fui yo al carajo con lo que escribí.
“I Appear Missing” tiene cambios de climas, machaques jugando con momentos de emoción que no emociona mucho que digamos, pero es llevadera.
Finalizamos con “…Like Clockwork” que es una forma algo depre de terminar la placa, teniendo efectos de viola algo rebuscados pero no armoniosos, y buenas subidas de ritmos y bajadas gracias a teclas de piano, el bajo es un protagonista acá.
En sí, el disco es para escuchar varias veces, no le tengas miedo si nunca le diste bola a la banda, como en mi caso. En otra oportunidad rompemos todo cuando suba uno de Kyuss.
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